Tengo la impresión de que el Parlamento Español actualmente se ha situado fuera de la realidad del país, en un momento de enormes necesidades sociales y de grandes problemas de Estado, como Cataluña. Para comparar, relatamos el mismo problema político y veremos cómo actúa ahora la derecha y cómo actuaba esta misma derecha cuando era gobierno. Veamos:
Al Gobierno de Pedro Sánchez, con menos 100 días de existencia, se le reprobó al ministro Maxim Huerta, que sólo llevaba seis días en el cargo, al conocerse que había cometido un fraude fiscal entre 2006 y 2008, que subsanó entonces. En la comparecencia dijo que presentaba su dimisión para impedir el «bombardeo» que, a su juicio, pretendía «minar el proyecto de regeneración del presidente Sánchez».
La ministra de Sanidad, Carmen Montón, presentó su dimisión tras la polémica generada por su máster de la Universidad Rey Juan Carlos. No hubo investigación jurídica ni tuvo que acogerse a su condición de aforada. Sin duda, más evidente era el favoritismo, probado y no castigado, del máster de Pablo Casado. Montón prefirió irse para que el caso "no influyera" en la labor del Gobierno de Pedro Sánchez.
Después de varias semanas de debates estériles, con el apoyo de la oposición de derechas ("PP" y Cs) y la abstención de Podemos, de nuevo se pide la reprobación de la Ministra de Justicia por unas grabaciones con Villarejo y el entonces juez Garzón. A este respecto, el juez de la Audiencia Nacional Diego de Egea ha dictado un auto en el que concluye que "las grabaciones de la conversación que la actual ministra de Justicia, Dolores Delgado, mantuvo en 2009 con José Manuel Villarejo, entonces comisario de policía, el entonces magistrado Baltasar Garzón y altos mandos policiales" “no afectan a la causa” sobre las supuestas actividades delictivas de Villarejo. Además los archivos sonoros en los que aparece la ministra de Justicia fueron un "corta y pega". Recordar que Pablo Casado también comió con Villarejo, al menos una vez, sin que nos haya contado nada. A la ministra se la reprueba por un hecho de hace nueve años que lo hizo en función de su cargo y que ya ha hablado a su favor también el magistrado asistente. En el debate hubo ofensas de carácter personal y coros.
Otro caso de características similares es la presencia del Presidente Sánchez para explicar su tesis, después de publicada y conocidos los informes favorables. Sánchez ha dicho que no irá. La derecha ha tenido la "ocurrencia" de crear una comisión, entre aplausos y vítores, quizás por ver cómo se usaba el Parlamento. Casado nunca leyó su máster y Cs apoyó todas.
Ahora recordemos, para comparar, las dos primeras reprobaciones al gobierno de Rajoy:
1º) Rafael Catalá, Ministro de justicia, fue el primer ministro de la democracia reprobado por el pleno del Congreso. Con él también fueron reprobados por primera vez en la democracia José Manuel Maza, Fiscal General del Estado y Manuel Moix, Fiscal Jefe Anticorrupción. Los tres fueron acusados de entorpecer la investigación de casos de corrupción. Lo fueron todos por el mal ejercicio de su cargo y se presentaron grabaciones que demostraban claramente la acusación. La votaron todos los grupos de la Cámara (incluso Cs), menos el "PP". Los tres fueron defendidos por Rajoy y mantuvo a todos en sus cargos. Ocurrió en mayo de 2017.
2º) Cristóbal Montoro, Ministro de Hacienda y Función Pública. Su reprobación se produjo por hechos ocurridos durante su ejercicio de ministro: "por haber beneficiado a los defraudadores con la amnistía fiscal, aprobada en 2012 y declarada posteriormente inconstitucional". Se produjeron para las arcas públicas pérdidas de varios miles de millones de €. La votación fue de de 197 a favor (incluido Cs), 135 en contra del "PP" y 5 abstenciones del PNV. Le apoyó Rajoy y no dimitió. Ocurrió en junio de 2018. Habría otras tres reprobaciones con similar resultado. Casado y los suyos votaron a favor de los reprobados y Cs apoyó todas. Siento que las formas no se puedan reproducir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario