LAS ELECCIONES CATALANAS PROMETEN SER SINGULARES

     Hay ciertos síntomas de que las próximas elecciones en Cataluña presentan singularidades que hacen ver que los viejos sentimientos que enfrentaban al pueblo catalán, ahora parecen manifestarse de forma distinta o al menos eso es lo que parece en las declaraciones que, en este tiempo previo, están proliferando. Esas novedades que destacamos nos hablan de eliminar el odio entre independentistas y españolistas, introduciendo el sentido común e incluso los clásicos nacionalismos parecen sustituirse por aspectos ideológicos que empiezan a cobrar fuerza. Se habla incluso de pactos de izquierda que superarían los viejos sentimientos. Quizás solo sea el germen de un viejo sueño y de nuevo, las derechas de ambos impongan su viejo y belicista lenguaje. Esperemos esos cambios, pues la realidad de esos años ha sido que en la Cataluña de los viejos odios ancestrales, no ha llegado a ningún sitio. Cada vez más catalanes se dan cuenta de que el sueño de la utopía nacionalista no ha servido para el progreso de su pueblo o quizás también que la mala gestión de la pandemia nos ha hecho ver a todos que las cosas pueden ser de otra manera. En otro orden de cosas, reconocer que en la derecha, Vox se ha abstenido para que se aprobara el decreto que permite la aprobación del gasto de los 140.000 millones de € concedidos por la UE, sin negociación alguna, un patriótico gesto, quizás para mejorar su imagen de cara a las catalanas. Cs quiere recuperar su visión de partido de centro y el "PP" de Casado, el primer patriota, ahora retoma el viejísimo discurso de "cuanto peor mejor".

     Este tiempo de la pandemia y otras situaciones anteriores han demostrado que el poder en manos de distintos modelos de independentismo no ha llevado a otra cosa que a perder espacios económicos e incluso a destacar en el avance de la pandemia. Demasiado tiempo y demasiados esfuerzos para nada.

    Ahora conocemos que veinticinco exministros de UCD, PSOE y PP han suscrito un manifiesto en el que abogan por abrir un "riguroso análisis" sobre si la "singularidad" de Catalunya está siendo "reconocida y valorada de manera justa", pero con el límite de que cualquier reforma sea compatible "con el proyecto común que es España". De los veinticinco firmantes del manifiesto, titulado "Ante el intento de separar Catalunya de España. Llamamiento a la reflexión y a la concordia", trece ocuparon una cartera ministerial con un Gobierno de UCD, siete con un Ejecutivo del PSOE y cinco lo hicieron con el PP. Todos están retirados ya de la acción política. Entre ellos Marcelino Oreja, Rodolfo Martín Villa, Juan Antonio Ortega y José Lledó, por UCD; Cristina Garmendia, José Bono, Cristina Alberdi y César Antonio Molina, por el PSOE, y Josep Piqué, Pío Cabinillas, Eduardo Zaplana y Abel Matutes, por el PP.

    Pero además, estas elecciones autonómicas se presentan muy reñidas y el resultado influirá en la política estatal. El llamado efecto Illa puede haberse diluido tras un último mes del tercer pico de la pandemia. Los indecisos son aún muchos: en el macrosondeo del CIS, con 4.300 entrevistas, el 39,1% no tenían definido su voto, pese a que en estos comicios, todos se juegan mucho. Parece indudable que puede ganar el PSOE y hasta formar gobierno. La situación catalana tendría otras expectativas, así como también el gobierno de España, después de, al menos, cuatro años de diálogo. Quiero pensar que Illa quedará muy cerca de la mayoría absoluta, contra lo que apunta el CIS catalán. Ahora es más posible que el PP no alcanzará a Ciudadanos, incluso que puede ser superado por Vox, una tragedia para el "PP" de Casado. Con lo que hay en juego, el 14F, los que amen a Cataluña, deben ir a votar, buscando el derecho a la salud, el derecho a ser libres y el derecho a una convivencia digna para todos y sin odios.

2021, EL AÑO DE LA ESPERANZA, COMENZÓ CON MAL PIE

     El año 2020 ha sido un año desastroso. La llegada de la pandemia a España en marzo puso a prueba no solo a la maltrecha sanidad heredada de Rajoy, sino que también fue causa de enormes desastres en la economía. Pese a todo, el año se despedía con esperanza: la UE. realizó una tarea solidaria desde el plano económico que marcó historia. En España, un gobierno de coalición PSOE-UP, encabezado por Pedro Sánchez, consiguió aprobar los PGE para el 2021 con un enorme crecimiento gracias a los apoyos de la UE. Por otra parte, la OMS aprobaba varios tipos de vacunas, marcando, sin fecha, el final del virus. También finalizó la era Trump, con todo lo que ello puede representar. Parecía que en 2021 habría recuperación, pero no ha sido así. La pandemia superó en su tercera subida todos los pronósticos y para colmo apareció la borrasca Filomena, y  como ya es costumbre, dio origen a una nueva bronca política.

    Ahora, como antes, la lealtad de los gobiernos autonómicos brilla por su ausencia. Así mismo Casado y Abascal siguieron compitiendo sobre quién dirá la mayor burrada contra el Gobierno y la crisis apareció con su peor cara, y volvió el odio.

    La borrasca, como antes hiciera la pandemia, ha dejado una señal indeleble en el Madrid de Ayuso, quien sigue haciendo de las suyas de manera inexplicable, pese a que el mismo Casado la dejó en ridículo, al preguntar en voz alta donde estaban los quirófanos, en el mismo momento de la inauguración del gran hospital de las pandemias, que tampoco disponía de personal sanitario. Ahora quiere vengarse de los que se negaron a ir al nuevo centro, saltándose la ley en los concursos.

    Pero la borrasca Filomena también descubrió las dotes de Díaz Ayuso, que ha tenido a Madrid con enormes problemas de todo tipo, hasta dos semanas después. Pese a ello se defendió diciendo: “Nadie me previno de que iba a ser de tal magnitud”. Sin embargo, la Agencia de Meteorología (AEMET), el 31 de Enero, anunció la enorme e histórica nevada que se venía sobre España en general y sobre Madrid en particular, anunciando incluso las bajas temperaturas que seguirían. También se puso a su disposición los servicios de la UME, que tanto censuró, poniendo el grito en el cielo por su partida, culpando al Gobierno en general y a su presidente en particular por su odio a Madrid. No tuvo en cuenta Ayuso que cuando ordenó rebajar de 2 a 1 el grado de Filomena, suponía, automáticamente, la salida de ese servicio. Ahora su política consiste en proteger la economía antes que la salud, además de mangonear los datos.

    Por su cuenta, el líder del PP, Pablo Casado, tuvo la ocurrencia de pedir que parte de los fondos europeos que llegan a España para hacer frente a los estragos del coronavirus se destinaran a sofocar las consecuencias de Filomena. Sin embargo, los expertos avisaron que eso no tendría sentido. Así lo ha deslizado la profesora de Derecho de la Universidad de La Rioja, Mariola Urrea, quien ha calificado, en una conversación en la Cadena Ser de "ignorante" al presidente popular. Como no tiene soluciones, solo tiene ocurrencias. También tendrá que explicar cómo hace compatible su sentido patriótico, apoyando a los  independentistas en la nueva fecha electoral, que evidentemente favorece sus intereses.

    Por último reprochar las palabras de Pablo Iglesias, comparando la huida y el confortable retiro de Carles Puigdemont con la masiva salida andando y cargados con sus enseres de los miles de exiliados republicanos españoles, muchos catalanes, que fueron aparcados cerca del mar entre alambradas y algunos terminaron en los campos de exterminio. Y ahora, responde con soberbia, dejando claro que no admite lecciones.

    Afortunadamente el pasado día 20 vimos la toma de posesión de Joe Biden con la esperanza de que muchas cosas pueden cambiar. Pese a todo, aun hay ilusión.

ES PREOCUPANTE LA UTILIZACIÓN QUE SE ESTÁ HACIENDO DEL ASALTO AL CAPITOLIO

  De una manera inexplicable, Pablo Casado ha aprovechado un importante acontecimiento como el asalto al Capitolio para, utilizando falsos paralelismos, igualar ese momento con la situación política de nuestro país, con el único fin de atacar al Gobierno de Coalición. Como respuesta pública a los hechos provocados por Trump, se limitó a decir que los hechos eran inaceptables. Al día siguiente, cuando vio que podía serle útil para un ataque al Gobierno, aplicó las protestas de “rodea el Congreso” de 2012 que protagonizaron algunos participantes en el 15 M, así como con lo ocurrido en Cataluña en octubre de 2017 con motivo del referéndum ilegal. En su estrategia, siguió como otras veces la estela de Vox. Abascal manifestó que la izquierda llevaba años dinamitando instituciones y controlando medios de  comunicación a su antojo. Casado se dejó llevar por el odio y erró de nuevo en su seguimiento. No olvidemos que durante el mandato de Trump, Casado afirmó en varias ocasiones que el presidente era un hombre de centro.

Pero también algunos medios de comunicación olvidan la suerte que tenemos de vivir en una democracia, nos guste o no nos guste el gobierno que tenemos. Esos medios callan ante los desafíos ultras y no los desenmascaran. No hay respuesta a las mentiras fragantes y sus silencios contribuyen a que las campañas desestabilizadoras de las derechas adquieran dimensiones peligrosas. La mentira siempre es enemiga de la democracia y no descubrirla cuando se puede, es caminar hacia el populismo.

El "PP" de Casado utiliza con frecuencia mentiras sobre mentiras, ahora acusan a Podemos de la manifestación "Rodea el Congreso", comparándola con la actuación de Trump y los asaltantes del Capitolio en Washington. No han tenido en cuenta que cuando se produjo la acción de rodear el Congreso, UP aún no se había fundado. A mayor abundamiento, aseguraba el actual Alcalde de Madrid, con profunda convicción: "El origen intelectual de lo que sucedió ayer en EEUU y lo que pasó en España con rodea el Congreso es el mismo". Olvidó decir que ellos mismos han alentado otras concentraciones frente a la Cámara Baja este último año y que el secretario general de Vox, Javier Ortega Smith, intervino en la concentración de Jusapol ( una asociación española, formada por agentes del Cuerpo Nacional de Policía y de la Guardia Civil, de todas sus escalas y categorías) frente al Congreso el pasado 3 de marzo. Son así, viven en una democracia, utilizan sus libertades, extendiendo mentiras para su provecho, pero no olvidemos que carecen de sentido democrático y solo les interesa el poder.

Si nos fijamos cómo actuaba el presidente Trump durante su mandato, veremos que ha basado su política en el engaño de forma sistemática para denigrar al adversario, en lugar de aportar ideas o alternativas políticas. Este comportamiento ha encontrado un singular imitador y admirador en Pablo Casado. En esta situación, el asalto al Capitolio y la pronta salida de Vox, apoyando el comportamiento de Trump, parece que han hecho recapacitar a Casado, que ha cargado contra Vox por apoyar a Trump y justificar que alentara el asalto al Capitolio. Ahora se intenta que Trump sea castigado con otro 'impeachment' histórico por incitar a la violencia contra el Gobierno de EEUU. De momento, el Congreso ya lo ha aprobado, con el apoyo de 10 votos republicanos.

  En otro orden de cosas, ahora sabemos que Patrimonio Nacional paga los sueldos y viajes del personal desplazado a Emiratos Árabes Unidos para el rey emérito. La Covid-19 golpea sin pausa y la vacuna va lenta, apoyados ambos por "Filomena". El gobierno catalán quiere aplazar las elecciones por su interés, Casado, sin pensarlo, culpa de  todo al Gobierno... A veces la realidad parece un mal sueño.

2021 COMIENZA CON UNA FRENÉTICA ACTIVIDAD POLÍTICA Y EN LOS JUZGADOS CON MUY DISTINTO HORIZONTE

  Con un programa tan social y denso como el que ha planteado el Gobierno de Coalición, resulta inevitable una legislación urgente para llevar adelante el programa previsto. Además, las circunstancias obligan a una crisis de gobierno, para bien.  

El Presidente plantea, para resolver la crisis, mover cuatro departamentos, aprovechando los cambios a los que se puede ver obligado si sus apuestas salen como prevé: la portavocía, Industria, Ciencia e Innovación y la ya conocida de Sanidad. También, desde Moncloa, se piensa en varios nombres que a su condición de ministros, sumarán tareas en instituciones internacionales. Por último, Moncloa considera que le conviene el discurso del ahorro institucional y si el ministro Duque acaba saliendo a la ESA, su departamento podría volver a refundirse con Universidades de Manuel Castell. Por último, el Presidente ha manifestado: "En caso de reestructuración del Gobierno durante la legislatura, se mantendrá el número de áreas gestionadas por el PSOE y Unidas Podemos y su peso en el conjunto del Gobierno en los términos acordados al inicio de la coalición". Debería insistir sobre lo que ya dijo la Vicepresidenta Primera: "Las deliberaciones del Consejo de Ministros son secretas".

En cuanto a la actividad del Congreso, hasta ahora bastante importante con casi medio centenar de iniciativas, destacamos la Ley de Educación, la de la Eutanasia y la Ley de los PGE. La actual tarea tiene a su favor el mantenimiento de la mayoría de la Moción de Censura, que esperemos que siga funcionando, pese a las elecciones del 14 de Febrero en Cataluña. En esta tarea, solo podemos conocer las iniciativas para el mes de Enero, pues la evolución de la pandemia y de la vacunación nos hace ser prudentes. El Ejecutivo quiere remitir al Senado al menos cuatro leyes: ley de cambio climático y transición energética; la de infancia, dos propuestas legislativas muy ambiciosas, la ley de medidas urgentes en materia de protección y asistencia a las víctimas de violencia de género durante la pandemia de covid-19, aprobada  en marzo como Real Decreto Ley, y la reforma de la legislación civil y procesal para el apoyo a las personas con discapacidad en el ejercicio de su capacidad jurídica. 

La parte jurídica se refiere de manera exclusiva al frente judicial que complica los planes de Pablo Casado para 2021 y veremos que no es ajeno a su posición intransigente ante cualquier negociación sobre el CGPJ. Se garantiza que la crispación seguirá en las Cortes.

Los próximos meses serán un recorrido judicial por la historia corrupta del "PP" durante los últimos doce años, iniciada con el caso Gürtell, que celebrará el próximo 8 de febrero el juicio de la pieza conocida como caja B, y siguen vivos: el caso Púnica, el espionaje a Bárcenas; el caso Boadilla sobre adjudicación de terrenos; la fiscalía y la abogacía del Estado consideran al "PP" responsable civil subsidiario de los delitos fiscales atribuidos a sus tesoreros; el caso Arganda del Rey; el viaje del Papa a Valencia; los contratos del Gobierno de Francisco Camps, Esperanza Aguirre y los contratos del Campus de la Justicia en Madrid... Con tal curriculum, Pablo Casado deberá defenderse, en función de su posición en el "PP" en ese tiempo y pese a todo seguirá insistiendo en obstaculizar la renovación del CGPJ. En política, desentenderse de los mandatos legales no es propio de un constitucionalista como él. Como bien sabe el presidente del PP, este órgano cuenta actualmente con presencia mayoritaria de vocales del ala conservadora, que han seguido nombrando jueces, incluso del Supremo. Sin duda el año 2021 no será el deseado por el actual Presidente del "PP". También Trump, su líder, ha caído. 

2021, UN AÑO QUE PUEDE MARCAR EL NUEVO TIEMPO

     La aprobación de los nuevos presupuestos para 2021 marca el inicio real de una nueva legislatura de tres años de duración. El último tiempo nos ha mostrado la nueva cara de la UE, dando paso a un sentido solidario que hasta ahora se desconocía. Espero que ese grupo de 27 países de la UE nos dé a todos seguridad por esa pertenencia. Quizás sería bueno crear un sistema de defensa que nos permita atender la frontera común. Uno de los principales problemas en este momento es que en el Gobierno de Coalición las discrepancias internas, en muchos caso normales y hasta deseables, ahora son aireadas de manera individual en un aparente afán de notoriedad. Sabemos que tarde o temprano se propondrá la alternativa a la monarquía (España es experta en caídas y restauraciones), pero considerar urgente ese problema puede ser un error. Creo que deben ser prioritarias la gestión social, educativa, de investigación, ecológica, la España vaciada, la igualdad de la mujer, eliminar el desempleo, la solución definitiva de las jubilaciones, la emigración... Pensemos que hace falta una reforma constitucional para votar el referéndum Monarquía o República, reforma que requiere el apoyo de las dos terceras partes del Congreso y del Senado, la disolución de las Cortes y un nuevo apoyo de las nuevas Cámaras con la misma proporción de votos, lo que supone, al menos, el apoyo de 233 diputados del Congreso y 177 senadores. Sería una enorme torpeza acometerlo ahora y mantener un debate constante. Sin duda, es un problema que será necesario abordar, pero ahora no es el momento.

    El reciente acuerdo del “Brexit” supone evitar las incertidumbres que hubiera ocasionado un desacuerdo, como también la toma de posesión en Enero de un nuevo Presidente en EE.UU., que, entre otras cosas, apoyará los acuerdos de París. Todo ello nos anuncia que el año se está cargando de acontecimientos que invitan al optimismo. Pero veamos algunos de los importantes obstáculos que tiene que vencer el Gobierno.

    El obstáculo inmediato es vencer definitivamente a la Pandemia. La vacunación masiva debe manejarse con cautela, pues su éxito es requisito imprescindible para conseguir hacer crecer la economía a un ritmo importante en dirección a ese nuevo tiempo. Sin olvidar que aún existen en la derecha los viejos “tics” del pasado. Así, el “PP” de Casado está utilizando la campaña de vacunación como un nuevo campo de batalla política, olvidando, como siempre, el envoltorio con el que la presidenta Ayuso decoró las mascarillas que repartió gratis y pronto sacará su patriotismo con Gibraltar, se acuerde lo que se acuerde, ahora que tiene menos espacio para hacer daño.

    Por otro lado, el prestigioso diario de EE.UU., The New York Times, ha publicado un reportaje en el que se refiere a los exmilitares españoles que critican al Gobierno y siguen prefiriendo el franquismo, asegurando que, al parecer, no reflejan la opinión de los militares en activo. Explica cómo ”la influencia de la extrema derecha en España en las Fuerzas Armadas se ha convertido también en un problema en otros países, especialmente en Alemania”, destacando el reportaje que Vox sigue creciendo y ya es el tercer partido del Congreso español. El periódico destaca varias imágenes con productos de ‘merchandising’ de Vox, como llaveros e insignias, junto con algunas fotografías del dictador. Todo ello lo explica el hecho de que tras el fallecimiento de Franco y con la llegada de la democracia a España, el Ejército quedó “completamente intacto”, ahora a las órdenes del Rey. Falta renovar el CGPJ, para garantizar la independencia judicial y asumir que en la democracia que usa la derecha no hay empatía ni diálogo. Por si fuera poco, las elecciones catalanas tienen a Illa como candidato del PSC. Feliz año 2021, que nos lleve a ese nuevo tiempo, en el que nadie quedará atrás.