Una célebre frase es ahora oportuna, para dar salida a este singular momento político: "tenemos que hacer de la necesidad virtud". La democracia está tan por encima de los políticos que permite segundas oportunidades. Es cierto que el reciente pasado no hace que nos sintamos orgullosos. Nuestra clase política aún no usa el diálogo ni la empatía sigue usando el debate, de cuando el poder era cosa de dos. La clase política no debe perder más tiempo en crear un relato que declare culpable al otro y a ser posible que ese otro sea Sánchez. No es ni útil, ni enriquecedor, ni estético como demuestra la pasada sesión del Congreso. Creo que es más útil analizar su estrategias y recordar, pues todo apunta a que las repetirán. Sospecho que seguirán los ataques personales y los cordones sanitarios y se hablará poco de programas, que den solución razonable y económicamente posibles a los grandes problemas de España. Hay que ir a votar, pues si no votamos el error puede costarnos cuatro años o más. El momento no lo permite.
Empiezo por algo que me impresionó mucho en su momento, pero que hoy parece olvidado y no lo considero justo, me refiero al manifiesto de la Plaza de Colón en Madrid el febrero pasado apoyado por "PP", Cs y Vox que contenía únicamente insultos y mentiras en un documento que se presume fue reflexionado antes de su lectura pública. Entre las graves mentiras se decía que Sánchez había asumido los 21 puntos de Torra y que le recibió en la Moncloa con lazo amarillo en la solapa, para llamarle traidor y muchos más. Asuntos todos desmentidos por el tiempo y en el momento oportuno por el propio presidente de los constitucionalistas de Cataluña.
En este momento, es más que probable que el "PP" siga con la misma estrategia de insultos y mentiras que removió a su partido, pues su resultado final, en espacios de poder que no en votos, ha sido importante gracias al Cs de Rivera que puede ser el que pague los platos rotos. La prueba más evidente es el grupo de personas de las que se ha rodeado en este último tiempo. Un partido que Casado heredó con pretensiones de ocupar un espacio político de centro/derecha y que hoy es el mayor valedor de Vox, al que quiere integrar en su "España Suma". Cuidado con la abstención de los desengañados de la izquierda, pues pueden dar el poder a esta singular derecha.
Por otro lado, el Cs de Rivera se ha salido de la realidad y da la impresión de haber perdido cualquier convicción política. El "PP" lo ha utilizado a su antojo y ha conseguido un poder que le ha salvado de la ruina política. Hoy el que empezó liberal aparece unido a Vox. En Cs no saben dónde están sus convicciones políticas. Su última "ocurrencia" política, la de última hora, da un poco de pena. Su actuación en Cataluña con Valls, que hubiera dado la alcaldía a un independentista, es inexplicable.
Por último, lo más difícil de entender de Iglesias: Negar cuatro veces la presidencia a Sánchez; no aceptar la oferta de coalición que le ofreció; no aceptar la negociación programática; pedir una votación a los militantes para justificar su vivienda y no hacerlo para elegir su sustituto cuando renunció a la vicepresidencia.
Por último, destacar que Sánchez no ha buscado simplemente una investidura, ha buscado un gobierno estable que permitiera realizar ese gran programa que presentó. Además, en este corto y difícil tiempo de gobierno con los presupuestos de Montoro, ha conseguido que la UE. nos dé espacio entre los países importantes, lo que ha supuesto el nombramiento de ministro de Exteriores de la UE a Borrell, la presidencia del grupo socialdemócrata en el Europarlamento, explicar el problema catalán en la ONU impidiendo su acción exterior; una Diada sin sobresaltos y un tratamiento distinto del Europarlamento. Todo por la unidad de España. ¿Que han hecho los patriotas mientras?
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