Era de esperar que la aprobación de los PGE para el 2021, cargados de programas sociales, ecológicos, culturales, avances tecnológicos..., serían una ruptura en las expectativas políticas de la derecha, que podría suponer la creación de nuevos obstáculos, dentro de una nueva estrategia de los partidos afectados. La realidad ha superado, en principio, las expectativas. La misiva dirigida al Rey por un grupo de mandos militares del ejército del aire retirados y la carta del General de aviación, también retirado, dan una nueva dimensión, pues esas extrañas manifestaciones nos retrotraen, de alguna forma, al franquismo. Según las derechas, "los franquistas son los demócratas y el Gobierno, elegido democráticamente, el golpista". Más grave son las banderas fascistas con Vox en Cataluña, el apoyo de Ayuso y el gesto de Casado.
Tampoco parecen normales las actuaciones de algunos sectores de la justicia, definidos claramente por una opción política. Ahora es oportuno el ejercicio de la prudencia, que no quiere decir dejar pasar, sin esclarecer, lo que está pasando en el Ejército y en la justicia, para que cada uno ocupe, lo antes posible, el puesto que le corresponde en la Constitución. Lo curioso es que Vox y algunos destacados miembros del "PP" de Casado apoyan el camino emprendido por los militares retirados. En cuanto a la justicia, el propio Casado es el promotor y máximo beneficiado por los nombramientos, realizados por el CGPJ en funciones, dos años después de lo que se marca como su final en la Constitución. Es evidente que mientras Casado tenga pendiente aclarar sus responsabilidades o tolerancias en la enorme corrupción del "PP" no permitirá ningún acuerdo con el Gobierno, aunque sería bueno que por dejar clara la independencia de la justicia dimitiera el Presidente del CGPJ, con lo que el máximo órgano de los jueces obedecería el mandato constitucional y con ello la independencia.
Ocurre además que mientras el PP europeo pide la expulsión del grupo del primer ministro húngaro, los 'populares' españoles guardan silencio e incluso le dan su apoyo. Saben y sabemos que el primer ministro de Hungría, una de las puntas de lanza de la extrema derecha, vetó junto a su homólogo en Polonia, el Presupuesto de la Unión Europea y el fondo de recuperación de 750.000 millones. Ambos se ganaron el reproche público de varios líderes europeos, destacando el presidente del conservador Partido Popular Europeo. El bloqueo perjudica a los países más azotados por el coronavirus, entre ellos, a España. Una nueva traición de Casado, que se considera el primer patriota. Afortunadamente, parece que el resto de países han amenazado con suspender los fondos a Hungría y Polonia, lo que puede hacer que su posición cambie. Casado podría hundir a España, con tal de conseguir el poder.
Ahora, recordemos la definición de democracia que dio D. Enrique Tierno Galván: "La democracia es el único sistema político que transforma la calidad en cantidad. Así, solo un pueblo culto puede hacer que la calidad se imponga a la cantidad". Sin duda la próxima generación necesita la nueva Ley de Educación, ya aprobada, que facilitará la igualdad en el derecho a la educación, con un importante aumento de la financiación pública y no primará la Concertada, sistema preferido y usada por los que más tienen.
Termino recodando algunas palabras de la presidenta del Congreso, Maritxell Batet, en la escalinata del Congreso con motivo del 42 aniversario de la Constitución. Entre otras cosas dijo: "llamo a la unidad frente a las lecturas partidistas de la Constitución y rechazo considerar enemigo al adversario político". Recalcó que “todos los partidos tienen plena legitimidad". Recordó que “los partidos no terminan su función en las elecciones, sino que son herramientas para llegar a acuerdos" y que "la democracia exige aceptar al otro, someter a crítica sus razones y aceptar su plena y legitima participación".
No hay comentarios:
Publicar un comentario