Es indudable el triunfo rotundo del "PP" de Ayuso, muy cerca de sacar mayoría absoluta, lo que les permite no tener que contar necesariamente con Vox; esperemos que así sea. Además, los barrios obreros han votado en masa por el "PP", que ha sacado más votos que toda la izquierda junta. Ese desastre ha sido especialmente grave para el PSOE; sólo se ha salvado "Más Madrid", que ha demostrado la calidad de sus líderes, como Íñigo Errejón y especialmente Mónica García, una mujer enormemente bien preparada, con las ideas muy claras, con valentía y mesura en las respuestas. Líderes de un partido como “Más Madrid”, escindido de UP, ahora liderarán la oposición a Ayuso y con la representación más numerosa de la izquierda en el Parlamento de la Comunidad de Madrid. Quizás, algo positivo de estos días ha sido que se haya conseguido dejar al descubierto a Vox. Por otra parte, hay que reconocer la sinceridad de Iglesias con su renuncia y su reconocimiento de que no ha aportado nada positivo a la izquierda. Por su parte, Gabilondo no tomará posesión ni formará parte de la Asamblea.
Pese a que todos dimos por cierto que la campaña tendría repercusión nacional, sólo es previsible un aumento de su moral. La realidad, sin que por ello bajemos la guardia, es que el mandato es de dos años, durante los cuales habrá que estar más alerta y aprender de los errores cometidos, renovando adecuadamente el PSOE de Madrid.
La multitud que esperaba la comparecencia de Ayuso en Génova fue enormemente expresiva sobre sus preferencias entre Casado y Ayuso. Casado recibió críticas y abucheos por su intervención, que quitaba tiempo a la esperada intervención de Ayuso, quien en sus palabras, recibidas con vítores y aplausos, rompió el argumentarío de Casado sobre el cambio de ciclo y le avisó, diciendo "Hay que ser prudente", advertencia muy aplaudida.
Aun está por resolver si Ayuso aspirará, ahora que tiene todo a su favor, a intentar el ascenso a la presidencia nacional del "PP". Conviene recordar la mala idea de Casado cuándo preguntó por los quirófanos en la inauguración del hospital "Enfermera Isabel Zenda". Habrá que esperar. Pero ahora nos quedan por delante una serie de preguntas a las que es necesario dar inmediata respuesta.
¿Dónde está el PSOE de Madrid y su democracia interna para elegir candidato?
¿Cómo fue elegido el candidato a la presidencia de Madrid en las listas del PSOE, que en su primera intervención hizo una selección de sus futuros aliados y poco después se le obligó a retractarse y se permitió que fuera Iglesias el director real de la virulenta campaña del PSOE, dejando a Gabilondo en un lugar secundario?
¿Qué pasó para que el Presidente Sánchez entrara al trapo en la estrategia de Ayuso y diera la impresión de ser su rival?
¿Qué pasó para que el Consejo de Ministros, en plena campaña, sacara una norma que impedía la desgravación por la declaración conjunta?
¿Qué nos está ocurriendo para que, después de vivir durante dos años una extravagancia tras otra en materia sanitaria y fiscal, y que las encuestas predigan que en las elecciones del 4 de mayo la candidata del PP podría duplicar los apoyos con los que llegó al poder en 2019, no se eligiera una estrategia más eficaz?
¿Dónde están los programas que dieran solución a tanto desmadre sanitario y fiscal, plasmando la realidad actual y aportando soluciones desde la izquierda?
Por último: ¿Cuál será la explicación del Presidente Sánchez sobre el desastre y su repercusión futura?
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